Tras presentar el homónimo cortometraje de anticipo, Enric Montefusco publica Viaje al centro de un idiota. Quien haya podido disfrutar de esa impactante pieza audiovisual ya sabrá que el nuevo álbum del que fuera líder de Standstill es cualquier cosa menos convencional. Disponible desde primera hora de hoy en doble CD y digital -el vinilo, en unos días-, culmina una exploración multi-disciplinar sin demasiados precedentes: música, teatro y audiovisual en el principio creativo de trece movimientos que exigen tiempo y atención, pero ofrecen una gran recompensa emocional.

Extensión del montaje escénico que a lo largo del último año se ha pre-estenado en festivales como Grec, Temporada Alta o Mercat de Música Viva de Vic o, más recientemente, Trovam, Viaje al centro de un idiota nos muestra el perfil más íntimo, pero también el más transgresor de un autor siempre a contracorriente. Dividido en Infierno y Purgatorio, dos etapas de una brutal inmersión en el abismo de la pérdida de la identidad, de la moral y de la razón, sitúa los textos en el centro de la dramaturgia y, con la sustanciosa colaboración de Nico Roig y Quartet Brossa, incorpora sonoridades cercanas al minimalismo, la electrónica retro o el spoken-word alcanzando registros musicales inéditos en su carrera.