Pianista y compositora, es considerada una de las creadoras más originales y únicas que han aparecido en los últimos tiempos en la escena musical del país. Una biografía frenética que transita entre la música, el teatro y el activismo. Musicalmente, Peya es inclasificable: bascula entre la música de cámara, el jazz, el pop y la electrónica, manteniendo siempre como centro de gravedad el piano «Clara Peya transita entre la música vocal y la improvisación, entre canciones con aroma a pop melódico y piezas instrumentales de rabiosa contemporaneidad». Ana María Dávila (El Mundo).
Ella es energía y sentimiento en estado puro, sin dejar de lado el grito y el compromiso con la libertad. Una personalidad artística contagiosa y torrencial que en directo se desnuda, se transforma y se esparce por todo el escenario y más allá. Su forma personal de tocar ha hecho que sea considerada una de las pianistas catalanas más escénicas y transgresoras: «Peya ha creado un mundo de melodías frondosas asentado en super dominio del piano, que toca con ademanes teatrales heterodoxos, y de la mano de cantantes Elegidos con gusto y intenciones». Jordi Bianciotto (El Periódico).
Feminista declarada, se define a sí misma como «inquieta, visceral, intensa y trascendente ». Clara Peya huye de tópicos y, sobre todo, cree en el poder del arte para la denuncia «a mi música le digo romántico-contemporánea o punki-romántica». La música lo es todo para ella, utiliza el piano para expresarse, ser libre y transmitir ideas.